La Coqueta en Bariloche: Denuncia de Discriminación y Agresión
Publicado: 02 / 09 /2025La influencer conocida como “La Coqueta” ha alzado su voz tras ser víctima de un grave caso de discriminación y violencia física en el boliche “La Juana” de Bariloche. En una noche que prometía diversión, lo que siguió fue un episodio de agresiones y robo, un reflejo sombrío de las tensiones sociales que viven muchos jóvenes, especialmente en espacios de ocio nocturno.
Testimonios de la experiencia vivida
El relato se hizo eco en redes sociales, donde Micaela Soloa, amiga de La Coqueta, compartió su experiencia en un storytime. Mientras disfrutaban de la velada, el personal de seguridad abordó violentamente a su grupo por estar fumando, a pesar de que otros también lo hacían. “No se puede fumar acá”, repetía el guardia, cuya actitud desencadenó una situación de tensión.
En el afuera, el panorama se tornó aún más grave. Otro grupo de jóvenes se unió a la agresión, alineándose con el personal del boliche. “Nos tenían marcadas por ser trans. Si hubiésemos sido mujeres cis, esto no pasaba”, afirmó Micaela, transmitiendo un claro mensaje de cómo la violencia está mediada por prejuicios.
La Coqueta expresó su indignación: “Pagamos la entrada, consumimos como cualquiera. Los boliches deben cuidar a quienes entran, no agredirnos”. Este clamor resonó en la comunidad LGBTIQ+, que salió en defensa, exigiendo medidas concretas contra la violencia y la discriminación.
La identidad de La Coqueta: Ariana Agostina Soria
Ariana Agostina Soria, conocida como La Coqueta, ha conquistado el mundo digital con más de un millón de seguidores en TikTok y casi 600 mil en Instagram. A sus 20 años, su historia es la de una joven que se ha vuelto un ícono en la creación de contenido, un camino que inició a los 17 años.
Recientemente, su nombre resonó debido a que en un programa de streaming reveló que había ganado 10 millones de pesos en un mes vendiendo contenido exclusivo, ayudando así a su familia. “Lo más importante para mí es mi familia”, afirma, reflejando su compromiso y valores personales en un mundo lleno de superficialidad.
Las denuncias de La Coqueta y el apoyo que ha recibido son un claro recordatorio de que la lucha contra la discriminación no solo es vital, sino urgente. La comunidad no debe ser sólo un espectador, sino un actor activo en la transformación de la realidad que enfrentan quienes, como ella, luchan por ser reconocidos en su dignidad.
